Maximiliano Martínez nunca bajó los brazos y siempre le puso el pecho a la adversidad. Una lesión en el hombro lo tuvo parado cerca de una temporada. Cuando volvió a jugar, San Martín lo cedió a Atlético Concepción. “Maxi”, lejos de bajonearse por ir a al Argentino B, redobló la apuesta. Los resultados están a la vista.
En el arranque de este nuevo ciclo futbolístico de los “santos”, el pibe de Alderetes sabía que arrancaba con desventaja por la cantidad de refuerzos que el club de La Ciudadela había sumado para esta temporada. Sin embargo, en el partido del miércoles pasado frente a Gimnasia de Jujuy, Martínez tuvo su oportunidad y no la desaprovechó. Por eso, el técnico Osvaldo Bernasconi apostó por él en el segundo clásico. El lateral no lo defraudo.
“A los jugadores del club, siempre le cuesta tener su chance. Eso pasa históricamente en las instituciones grandes donde los resultados son la bisagra de los proyectos. Eso lo tengo asumido desde que llegué a San Martín. Y no me quejo. Estaba preparado para aprovechar mi oportunidad y demostrarle al técnico que puedo aportar lo mío”, sostuvo el defensor de 22 años.
De la misma forma que se dice que los clásicos nunca son amistosos, Martínez reconoce que el domingo se fueron del Monumental masticando bronca. “Uno nunca quiere perder estos encuentros, pero lo que nos tiene que dejar conformes es el nivel de juego que mostró el equipo. Manejamos la pelota en gran parte del partido. La virtud de Atlético fue que estuvo certero en las dos veces que llegó. Allí radicó la mayor diferencia en los dos equipos”, dijo.
Aunque siempre manejó con cautela las situaciones que le tocó afrontar en la vida, Martínez, dentro suyo, presiente que esta temporada puede ser la de su consolidación en los “santos”.
“Ojalá que mis compañeros me ayuden a que esto se haga realidad. En lo personal, para que esto pueda concretarse debo ratificarlo en cada práctica. El combo perfecto sería consolidarme como titular en el equipo que logre el ansiado ascenso”, expresó quien considera que todavía le falta agregarle mayor confianza a su juego.
“Maxi” está dispuesto a dar batalla por la titularidad. Le sobran condiciones para conseguirla.